Kingdoms at War
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.

mejor esta

Ir abajo

mejor esta Empty mejor esta

Mensaje  Vicky Jue Jul 09, 2009 5:23 pm

Los rayos de Sol a través de las copas del bosque daban un color esmeralda al mismo, las gotas de rocío que mojaban mis pies desnudos mientras corría descalzo por las hierbas del mismo.

Los brillantes ojos de los animales me hablaban mientras pasaba entre ellos, tras horas de pasear por el bosque salte a un árbol en el cual me senté en una de las ramas mas altas.

(Muchos Años Antes)

Zash, Zash.

El sonido de las garras de un sable de noche desgarrando la carne de un animal, cuál fue mi imprudencia al querer acercarme a él, errores de jóvenes según mi maestro.

Los ojos verdosos del animal se clavaron en mí, un pequeño escalofrió me recorrió el cuerpo , el majestuoso animal se acerca a mí con movimientos lentos pero precisos.

Un sudor frio me recorrió el cuerpo, el animal estaba a unos centímetros míos cuando se sentó sin más a lamerse.

Tras de mí una voz que reconocí.

-Los animales son nuestros amigos joven Thatar, respétalos y ellos te respetaran a ti.

-Si Shan’do * dije mientras observaba lo que ocurría*


Mi Shan’do se acerco al Sable y tras acariciarle la cabeza le miro a los ojos, este volvió a donde estaba su presa y continuo comiéndola como si nada hubiera pasado.

-Muchas estaciones te quedan aun de aprendizaje.

-Algún día quiero ser tan sabio como tu Shan’do.


Mi Shan’do sonrió mientras me hacia un gesto con la mano, yo le seguí hasta un claro del bosque donde había un gran árbol, mi Shan’do coloco la mano encima.

-Ven joven Thatar, coloca tu mano junto a la mía.

-Si Shan’do, * dije mientras la colocaba*

-Lo sientes, es vida, es la madre naturaleza que nos habla a través de sus creaciones.


Las energías que sentía eran algo nuevo, era como mi maestro decía como si el árbol me hablara, podía entenderle por las fuentes de energía que emitía.

Largos años pasé junto a mi Shan’do, largos y prósperos años donde entendí que no debemos cuidar el bosque, sino preservarlo, ya que es él quien nos cuida a nosotros.

Las palabras de mi Shan’do hacían eco en mi interior, los misterios del bosque me eran rebelados gracias a la sabiduría de mi Maestro.

Los días eran largos y prósperos hasta que los bosques fueron amenazados de nuevo, los orcos, criaturas extrañas a las que nunca habíamos visto entraban en nuestros bosques a talarlos, cada árbol caído era como una herida en el corazón de los Druidas.

Nos enfrentamos a ellos y casi les vencimos, con la ayuda del Semidiós Cenarius la victoria de la naturaleza sobre las hachas estaba segura.

Pero como prever que antiguos enemigos se alzarían de nuevo, cuando los orcos segados por la corrupción de la sangre del Demonio nos atacaron fue devastador, la perdida que sufrimos nos produjo un dolor del que hoy en día algunos no nos hemos librado.

Pero ese no fue el mayor de nuestros problemas debilitados por la pérdida de Cenarius los Demonios nos atacaron de nuevo, esta vez el ataque iba dirigido a Nordrassil, en esta época y ante la negativa de algunos miembros de nuestra sociedad nos aliamos a los Orcos y Humanos en la defensa del Monte.

Nuestros aliados lucharon fieramente contra los demonios, pero todo intento era inútil, las fuerzas de la Legión de Fuego eran imparables y llegaron a la cumbre del Monte.


Las Fuerzas de mi raza lucharon contra los Demonios como nunca, las tropas de elites de las Centinelas arrasaban las filas demoniacas mientras las sacerdotisas invocaban las energías de Elune para curar y proteger a nuestros hermanos, enormes raíces salidas del suelo invocadas por los demás druidas atrapaban y aprisionaban a las tropas de la legión.

Poro nuestros intentos eran inútiles, mis ojos lloraron al ver a mi Shan’do atravesado por el arma de uno de los esbirros de la Legión.

Junto a un grupo de Sacerdotisas logramos escapar del Monte en contra de mi voluntad, dejar los puestos….

Pero no todo estaba perdido, sacrificamos nuestros dones para salvar este mundo, Sacrificamos a Nordrassil para eliminar al mal que azotaba nuestras tierras, Sacrificamos nuestra inmortalidad.

Pero como en palabras de mi maestro, la vida es como un árbol, nacemos de semillas y crecemos y morimos como es el círculo de la vida.

Algunos meses me costó entender el significado de lo que habíamos hecho, pero en eso reside la verdadera sabiduría, en saber entender los sacrificios que hemos realizados por salvar en lo que creemos.

(Presente)

Salto del árbol y caigo sobre Darnassus, la nueva capital elfico que s encuentra en el recién plantado Teldrassil, algunos nos opusimos a su plantación, pero las estaciones pasan, y Nordrassil es un viejo recuerdo del que nunca nos libraremos, un recuerdo que simboliza los sacrificios que hemos realizados por nuestro mundo.

Soy Thatar Moonlight, Kal’dorei al servicio de la madre Naturaleza, este es mi pasado, es hora de escribir el futuro.

Vicky
Invitado


Volver arriba Ir abajo

Volver arriba

- Temas similares

 
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.